Tormanta en el paraíso
Cómo superar una crisis de pareja.
¿Estás atravesando uno de esos momentos en que parece que todo se desmorona? Planteate objetivamente el estado de tu relación y trabajá para mejorarla.
“No me hace feliz”, “no compartimos nada”, “no estoy segura de seguir amándolo”, son algunos pensamientos que vienen a nuestra mente cuando esa relación, que alguna vez fue puro amor, empieza a encontrar obstáculos.
Las crisis son algo que ocurre en muchas parejas y lo importante es salir de ese estado donde la relación no es un lugar donde crecer, sino más bien un inconveniente para nuestra felicidad y nuestros logros.
Como cualquier conflicto, puede tener solución pero requiere de compromiso y voluntad, de querer y hacer, de ceder y comprender y, obviamente, de esforzarse.
MALOS PENSAMIENTOS
Es a partir de lo que pensamos y cómo actuamos que deterioramos el vínculo. Cuando aparecen pensamientos de celos, control, engaño y desconfianza se suele necesitar un trabajo más complejo para superarlos. En algunas ocasiones, se necesita ayuda de un especialista en pareja y familia.
EL MOMENTO DE PONERSE A TRABAJAR
El no sentirse feliz, plena, no poder intercambiar opiniones, disfrutar de las salidas o sentirse deseada son indicadores de que es tiempo de poner en acción algunas prácticas de salvataje. Esto no lo puede hacer un solo integrante de la pareja; se necesita de la motivación y ayuda del otro, quien deberá acompañar en esta crisis.
ALGUNAS CLAVES PARA “REMONTAR” LA SITUACIÓN:
– Dialogar
Intentar no imponerse y dialogar para lograr un consenso. Dejar de luchar por ver quién tiene la razón, para empezar a explicar los motivos o lógica. Centrarse más en el presente y no rememorar conflictos ya pasados.
– Reforzar la pareja
Volver a pensar en aquello que produjo felicidad y la elección del otro.
Los pequeños detalles como un beso, un abrazo, una caricia, una sonrisa o un momento de atención pueden llegar a ser muy importantes.
– Criticar conductas (no al otro)
Si hay que criticar algo, es mejor centrarse en lo que nos desagrada y no en la persona. El respeto es esencial para la buena convivencia. Se puede hacer una lista de aquellos elementos para cambiar.
– Buscar actividades en común
Permite retomar tiempo grato compartido. Aceptar el cambio y poder elegirse nuevamente.
Fuente: www.grandesmujeres.com.ar